Acapulco de Juárez; 24 de febrero de 2021.- Como “una espina clavada en el alma” fue de la forma en la que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador se refirió al caso de los 43 jóvenes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos, desaparecidos la noche del 26 de septiembre de 2014 en el municipio de Iguala.
Tras referirse al autoritarismo que durante años ha imperado en México, el presidente recordó el suceso que empañó la vida política y social del estado de Guerrero durante los años posteriores.
“Ese día el autoritarismo mostró de nuevo su rostro siniestro y se hizo evidente la complicidad del gobierno con la delincuencia organizada, por eso se pretendió engañar con la denominada verdad histórica.”
El presidente hizo mención también del “pacto de silencio” que se estableció en torno al caso, y las dificultades que esto ha causado para conocer la verdad de lo ocurrido esa noche.
Asimismo, refrendó su compromiso con los padres de los jóvenes y la sociedad, de seguir con la búsqueda hasta encontrar a los desaparecidos y castigar a los responsables del hecho.
