Los aparadores dentro de la boutique “Novias Emma” se encuentran casi repletos de mercancía, y es que esto es debido a la contingencia por Covid-19 que mermó las ventas de este sector por la cancelación de eventos sociales en el semáforo rojo y las restricciones de los salones de fiesta.
Lidia Flores Zapata, encargada del lugar, explicó que desde que inició la contingencia sanitaria sus ventas se desplomaron en más de un 50 por ciento, lo que la obligó a cerrar sus puertas por varios meses ante la falta de clientes, y tuvo que recurrir a gastar sus ahorros y pedir créditos para pagar nómina y los servicios del inmueble.