Los dirigidos por Jaime Lozano, llegaban al partido por la medalla de bronce, después de caer por la vía de los penales ante Brasil ¿El rival? El anfitrión y único equipo que lo ha derrotado en la justa veraniega, Japón.

Ya en las acciones, México se fue arriba en el marcador gracias a un penal muy bien ejecutado por Sebastián Córdova. Los mexicanos aprovecharon el buen momento y tras una falta en los linderos del área, Johan Vázquez aparecía a la altura del manchón penal y con un remate de cabeza ponía el segundo en el marcador.

Lo amargo del encuentro pasaría en el segundo tiempo, Diego Laínez sufriría una lesión en su tobillo que le impediría continuar en la lucha de la presea olímpica. Sin embargo, el mal trago pasaría rápido. Alexis Vega anotaría el tercer gol a la cuenta mexicana y aseguraría la medalla de bronce para nuestra delegación.

Los asiáticos reaccionaron con un gol en los minutos finales, pero muy poco sirvió. México se alzaba con la gloria olímpica y se metía al podio de futbol masculino. Justa recompensa para el equipo que dentro de la justa, más espectáculo proporcionó.

La escuadra del “Jimmy” termina su participación siendo el equipo que más goles anotó. 4 victorias, 1 empate y 1 derrota, son el saldo a favor del ex-jugador de los Pumas. Ahora que se sabe que no seguirá como seleccionador ¿Qué es los que le deparará?

Esta es la cuarta medalla para la delegación mexicana, de las cuáles todas son de bronce. A pesar de este triunfo, México sigue firmando una de sus peores actuaciones de la última época dentro de unos Juegos Olímpicos. De momento, nos encontramos en la posición 73, del medallero y muy por debajo de la grandes potencias.